4 de julio de 2014

¿Qué nos dice el color AZUL?

Acuarela de una estudiante de Arquitectura (100x70cm) - Caballo de Selene en el Partenón (442-438 a.C.) realizado por Fidias.

 "El color es la sensibilidad en forma material, la materia en su estado primordial - Ives Klein

El color azul es el representante de la gama fría, opuesto a los cálidos colores rojos que tanto nos recuerdan a las pasiones y al desenfreno. El azul es el color de la inteligencia ya que el frío raciocinio se aleja de aquellos sentimientos pasionales y de impulsos como son los celos y las infidelidades. Podríamos decir que el azul es el color de los sentimientos que conseguimos a largo plazo: la fidelidad, la amistad, la confianza... términos que nos transmiten una gran pazarmonía, es por ello que asociamos este color con estancias tranquilas y de relax.
 
También es el tono de lo infinito, todo aquello que no podamos abarcar: la inmensidad del océano, el cielo que nos rodea...e incluso como diría Descartes, de ese ser infinito que no puede ser alcanzado ni con la razón llamado Dios:
 
"Y no es obstáculo a ello el que yo no comprenda lo infinito o el que haya en Dios inumerables otras cosas que en modo alguno puedo ni comprender ni tal vez siquiera alcanzar con el pensamiento; y es que es inherente a la razón de lo infinito el que no pueda ser comprehendido por mí, que soy finito; y basta que yo entienda y juzgue precisamente esto, que todas aquellas cosas que claramente percibo, y que sé que conllevan cierta perfección e incluso también quizás otras innumerables que ignoro, que están o eminente o formalmente en Dios, para que la idea que tengo de él sea la máximamente verdadera de todas aquellas que hay en mí, y la máximamente clara y distinta" (Meditación III, p. 46)

El azul es el color de los Dioses, por lo que podríamos atribuírselo a Zeus, el "Dios de los Cielos", "Padre de todos los Dioses" y abuelo de Endimion, uno de los muchos enamorados que tuvo la diosa de la Luna: Selene. Ambos han sido retratados en muchas ocasiones por artistas pictóricos para representar en tonos azulados la leyenda que los une: El mito de Selene y Endimión.

Cuenta la leyenda que... Endimión era un hermoso pastor que tras sus duras jornadas de trabajo solía dormirse desnudo observando la luna, enamorándose así de ella. Una noche bajó Selene a la Tierra y al encontrarse a Endimión se enamoró también de él. Pero tenían un problema: ella al ser una Diosa era inmortal pero él no, por eso deciden acudir a Zeus. El Padre de todos los Dioses le concede el poder de la inmortalidad a Endimión pero sólo cuando éste estuviera dormido. Desde entonces Endimión duerme y Selene baja todas las noches para estar con su amado.


Selene y Endimión (1753- 1755) Jean-Honoré Fragonard - (1656-1746) Francesco Trevisani.
Contemplando los colores de estas dos obras pictóricas que representan el encuentro de Selene con Endimión podemos observar que, en ambos, el color azul lo lleva la figura femenina y no la masculina.
Hoy en día asociamos el azul al hombre, por eso de que a los bebé se les viste de celeste y a las niñas de rosa pero el azul siempre fue el representante de la feminidad ya que el azul es el color del agua, que tradicionalmente se ha asociado con la mujer. En oposición tenemos el rojo, que simboliza el fuego, la tierra y la masculinidad.

Probablemente éste fue el criterio que empleó en 1931 Juan O'Gorman al diseñar la Casa estudio de Diego Rivera y Frida Kahlo. El arquitecto mexicano proyectó dos volúmenes de concreto casi gemelos, uno azul para Frida y otro rojo para Diego, unidos únicamente por un pequeño puente. Esta sencilla vivienda se ha convertido en uno de los más importantes hitos de la ciudad de México, no sólo porque acogiera a dos grandes artistas sino porque fue una de las primeras obras arquitectónicas funcionalistas del país.

Casa Estudio de Diego Rivera y Frida Kahlo - Piedra de lapislázuli.
En ella O´Gorman combinó los conceptos europeos lecorbusianos y la arquitectura mexicana más tradicional, plasmando así sus innovadoras ideas: "el mínimo de gasto y esfuerzo por el máximo de utilidad".

Siguiendo estos planteamiento quizás el azul no hubiese sido el color más adecuado para este proyecto ya que el azul ultramar ha sido el color más caro de todos los tiempos. Los pigmentos del color ultramarino se obtienen de la piedra semipreciosa: el lapislázuli, una gema muy valiosa de la que se obtiene lazurita (polvo del mineral) que proporciona los pigmentos del azul.

Si O´Gorman hubiese tenido que emplear lazurita probablemente la casa de Frida y muchas obras arquitectónicas y pictóricas no hubiesen tenido esa tonalidad. Por ello, no quisiera finalizar este post sin nombrar y homenajear a Adolf von Baeyer que consiguió averiguar la estructura de la molécula del azul añil, C16H10N2O2: la indigotina. A partir este descubrimiento se hace posible la creación del azul artificial que se comienza a comercializar en 1897 para el disfrute de artistas y amantes del Arte.
 

2 comentarios:

  1. Además de usarse para remarcar la lejanía en la perspectiva, en contraste con los cálidos que se usan para dar sensación de mayor proximidad (de hecho las dos obras que has puesto de Selene y Endimión son un gran ejemplo).

    Muy buena entrada!

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